viernes, 31 de octubre de 2008

El Danubio, la iglesia del encantador pueblecito de Nagymaros y, en la montaña, las ruinas del castillo de Visegrád.
(Fragmento del mural del subterraneo bajo la estación de tren de Visegrád).


Han pasado ya varios meses desde la última vez que escribí algo en el blog. Podría resumir que ha sido una pausa por motivos técnicos (falta de conexión a internet) y también personales, aunque tampoco tenía muy claro como seguir, de qué escribir y cómo hacerlo. Pido disculpas a los que leéis el blog y con mayor razón aún a quienes habéis dejado mensajes (que no han tenido respuesta). Solucionados los problemas técnicos al menos, y con las ideas un poco más claras sobre el camino a seguir, continuaré ampliando los contenidos del blog, intentando, al menos en cierta medida, y desde mi perspectiva personal, mostrar un poco de la actualidad, la historia, la cultura y la geografía de este pequeño-gran país que es Hungría.

Gracias a todos los que leéis este blog, y muchos saludos desde Hungría.